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Abran paso al nuevo Audi TT

El trayecto de Munich a Salzburgo resultó ideal para poner a prueba la renovada versión del deportivo más deseado de Audi
mié 15 julio 2015 07:11 AM
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Fotos de Gunther Sahagún - (Foto: Fotos de Gunther Sahagún)

Imaginen el significado de esta pequeña frase para dos amantes de los autos: “Mañana viajan a Alemania para probar, antes que nadie, el nuevo Audi TT”. Como buenos profesionales, aceptamos felices la misión: no hay mejor lugar en el mundo que la Autobahn −la red alemana de autopistas con tramos sin límite de velocidad− para probar el modelo que este mes conmocionará la industria automotriz en México.

El recuerdo de un largo vuelo de la Ciudad de México a Munich desaparece al notar que el aeropuerto es un bastión de Audi. El lugar contagia el espíritu de la marca a los más de 40 millones de pasajeros que recorren cada año los pasillos del séptimo aeropuerto con más tráfico de Europa. Entre otros motivos, porque es sede del Audi Forum que no sólo presenta los últimos modelos de la marca, sino autos históricos perfectamente conservados y novedades de la línea Quattro —incluso, hay una tienda sólo para fanáticos de este sistema de tracción en las cuatro ruedas—. También cuentan con un auditorio para eventos que funciona como centro de capacitación para los miles de socios estratégicos que Audi reciben cada año. Aunque los headquarters de la compañía están en Ingolstadt, a una hora de Munich, el amor por la marca ha conquistado reinos aledaños.

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Un integrante del equipo local nos recibe al fotógrafo y a mí, y nos indica que nuestro auto espera en el estacionamiento. No tiene que decir más: a lo lejos vemos un Audi TT azul como recién salido de la línea de ensamble. Es más, podría asegurar que tiene cero kilómetros y lo trajeron en plataforma. Está impecable. Sin mayor protocolo, me entrega las llaves con una orden clara: devolver el auto en dos días... él lo estará esperando. El día no da para más. A escasos dos kilómetros de la terminal está el hotel donde pasaremos la noche.

La historia del Audi TT es un ejemplo a seguir en la industria automotriz. Al poco tiempo de su lanzamiento, en 1998, se convirtió en uno de los deportivos más cotizados del mundo. Comenzó a ganar premios en revistas especializadas y se convirtió en un estandarte de la firma alemana. En 2006 su línea se renovó y se conservó hasta 2014, cuando se presentó la tercera generación en el auto show de Ginebra, en Suiza, el mismo modelo que llegará a México este año.

Pero mejor concentrémonos en lo que nos trajo hasta aquí: la prueba de manejo. La aventura real comienza una mañana de primavera en Freising, el poblado vecino de Munich que alberga las pistas del aeropuerto internacional. Un amigo mexicano que reside en Alemania nos despierta a las cinco de la mañana, sabe que los primeros destellos de luz nos apresuran a salir rumbo a Salzburgo, nuestro destino final. Para tener las mejores tomas del TTS Coupé, decidimos rentar un Audi TTS Roadster para experimentar lo mejor de los deportivos alemanes. Sin pensarlo un segundo, elijo el TTS Coupé en color azul, un deportivo de 306 caballos de fuerza que, a primera vista, desborda elegancia y poder. El convertible color plata será el responsable de llevar la cámara fotográfica... ¡y yo seré el que acelere para lograr las mejores tomas!

Un olor denso impregna nuestros sentidos mientras conducimos por una carretera solitaria en algún lugar de Baviera, el mayor de los 16 estados que conforman la República Federal de Alemania. Caigo en cuenta que en esas construcciones de madera que se alejan en el retrovisor a más de 80 km/h —aún estamos en la ciudad— se está produciendo la mejor cerveza del mundo. El sonar del motor, el intenso calor y el olor a cerveza me recuerda que estamos en el país que vio nacer la marca de los cuatro aros hace varias décadas atrás. 

 

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Estar al mando de un auto tan poderoso en un lugar donde las reglas de tránsito se respetan al pie de la letra me pone los nervios de punta. Entre vueltas prohibidas, altos totales y cámaras de seguridad, siento que en cualquier momento mi madre aparecerá para gritarme que no sé manejar. No tardo en adaptarme: es fácil cuando se respeta el reglamento. Y, a diferencia de otros deportivos, el nerviosismo desaparece más rápido con todo el confort que ofrece en su interior el TT, como el sistema de 12 bocinas Bang & Olufsen que me hace olvidar que estoy manejando una bestia que acelera de 0 a 100 km/h en 5.3 segundos gracias a su motor 2.0 lt TFSI quattro de seis velocidades.

Al ingresar el destino en la consola central, me doy cuenta de la maravilla tecnológica que tengo enfrente. Mi dedo resbala como mantequilla al escribir, letra por letra, la ciudad mientras una voz de mujer me lo confirma: S-A-L-Z-B-U-R-G-O. De inmediato tenía la ruta en mi tablero de control, junto al velocímetro, al tacómetro y un montón de datos más. Éste es uno de los cambios más impresionantes de la nueva versión del TT: el tablero análogo ha sido sustituido por uno totalmente digital llamado Audi Virtual Cockpit, que integra una poderosa computadora que procesa datos e imágenes tan precisas que facilita la conducción. Ahora sí me siento un piloto certificado para manejar en un país como Alemania, con su sofisticada Autobahn.

Estoy preparado para sacarle el jugo a las mejores autopistas del mundo. El tablero me indica que entro a una zona sin límite de velocidad, así que cambio el modo de manejo a dinámico, lo pongo en modo manual, activo el spoiler y acelero a fondo. En segundos, los leds del TTS Roadster se alejan por el retrovisor mientras el doble escape de mi auto gorgorea deliciosamente. Por el walkie-talkie les confieso mi secreto... en segundos somos un par de Usain Bolts escuchando la radio alemana a 250 km/h.

La tercera generación del TT es, por mucho, la más fina y estilizada que ha presentado Audi. Las líneas exteriores hacen pensar en el trazo suave que el diseñador seguramente hizo sobre el papel al crear la nueva carrocería, que presume un espíritu más allegado al resto de los modelos de la marca. El manejo sólido, responsivo e inmediato es discreto en comparación con todas las miradas que roba. Incluso en Alemania, la gente nos voltea a ver a cada rato. No los culpo, están frente a una propuesta estética redonda, nada arrogante ni gritona, simplemente perfecta.

Después de casi 200 kilómetros de supercarreteras llegamos al lugar que vio nacer a Mozart. Es momento de cambiar el modo de manejo, relajarnos y disfrutar de otra hermosa ciudad mientras buscamos dónde comer un Schweinelendchen con sus respectivas Huber Weisses.

Es una pena abandonar rápido una región con tanta historia, pero el auto parece pedir más velocidad. Cruzamos hacia las montañas austriacas, repletas de árboles, uno tras otro, como encantados por el rugir de los escapes. Acelerar, frenar, tomar una curva pronunciada y acelerar de nuevo resulta adictivo. Con sus 1,400 kg no deja de ser un auto ágil, gracias al control de estabilidad y tracción en las cuatro ruedas.

De regreso a Munich nos cae la noche. El tablero regula en automático la intensidad de la luz al interior. Otro motivo para enamorarse. Y ni qué decir del eficiente consumo de gasolina que no nos mantuvo preocupados en ningún momento. 

El nuevo Audi TTS está disponible en México a partir de este mes. Resulta la mejor elección para aquellos que buscan un deportivo veloz y versátil que se adapte al caos de una metrópoli. Total, acá ya dominamos las reglas de tránsito.

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