Madonna dirige su tercera película pero... ¿es buena idea?

Filth and Wisdom en 2008 y W.E. en 2011, ambas dirigidas por la cantante Madonna, tienen un 25% de la crítica en Rotten Tomatoes y un lamentable 13%, respectivamente. Al parecer, los críticos no aprecian el trabajo de la artista en el cine y se ha llegado a llamarla "vacía", "sin talento" o "aburrida" en su trabajo.

Su primera obra no captó el interés del público y se dijo, aparte de que el guión era malo, que la dirección pecaba de opulenta. De hecho, W.E., una historia sobre el romance del rey Eduardo VIII con la estadounidense divorciada Wallis Simpson, tan solo ingresó 3,500,951 dólares en la taquilla global cuando se estima que costó alrededor de 15 millones de dólares. En resumidas cuentas, un fracaso comercial absoluto.

Es por eso que sorprende que, pese al estrepitoso fracaso en Hollywood, quiera hacerse responsable de una tercera película, Ade: A Love Story. Esta adaptación de una novela de Rebecca Walker, hija de Alice Walker –conocida por escribir El color púrupura– y el abogado por los derechos civiles Mel Leventhal, narra la historia de una estudiante enamorada de un joven musulmán. Farida, de 19 años, dejará su vida para casarse con Adé y trasladarse a África para vivir sin preocupaciones materiales. Sin embargo, contraerá la malaria en el contexto de una sangrienta guerra civil... Una verdadera tragedia.

Tras leer la novela en 2013, Madonna exclamó: "Lean este libro, es una historia de amor preciosa". Posteriormente, hizo todo para dirigirla hasta comprar los derechos en 2014. Sin embargo, el productor independiente Bruce Cohen ha apostado por ella y junto a Jessica Leventhal y la propia Rebecca Walker buscan un guionista para que lleve a cabo la adaptación.

Pero toda incursión de Madonna en el cine no ha sido negativa... En 1997 se llevó un Oscar a la mejor canción original por el musical Evita y en 2012 la criticada W.E. ganó un Globo de Oro en la misma categoría. Así, no hay duda del talento musical de la italoamericana. Aún así, a la hora de agarrar la cámara parece ser que los errores se suceden y, por mucho que su exesposo Guy Ritchie sea director y que ella haya actuado desde 1979, el arte cinematográfico parece que no es lo suyo. A la tercera va la vencida, pero puede ser que ese nunca sea su caso...