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Mick Jagger habla sobre su relación con David Bowie

Entrevistamos al líder de los Rolling Stones
jue 04 febrero 2016 11:46 AM
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David Bowie feat Mick Jagger - Dancing in the Streets (YouTube/Getty Images) - (Foto: David Bowie feat Mick Jagger - Dancing in the Streets (Yo...)

Podrá ser uno de los músicos más famosos del mundo, pero su poder no fue suficiente para poder concretar el viejo sueño de producir una película épica sobre la industria de la música en la que comenzó a trabajar con Martin Scorsese dos décadas atrás. La era dorada de la televisión resucitó el proyecto y Mick Jagger finalmente pudo darse el gusto de ver como Vinyl se convertía en realidad, con el propio Scorsese dirigiendo el piloto. La serie debutará en Estados Unidos a mediados de febrero, con Bobby Cannavale, Olivia Wilde y Ray Romano en los papeles protagónicos. El gran rockero de 72 años aceptó platicar con Life and Style  para hablar de su nueva aventura como productor pocos días después de la muerte de David Bowie, por lo que la estrecha relación que los unió fue parte obligada de la plática.

La muerte de David Bowie debe de haber sido un duro golpe para ti...

Por supuesto. Eramos grandes amigos, y nos la pasamos muy bien juntos en muchas ocasiones. Solíamos comparar ideas musicales y divagar sobre cosas que podíamos llegar a hacer en nuestros conciertos. Yo analizaba sus shows y él los míos, pero también hablábamos mucho de películas, porque a los dos nos interesaba mucho el cine, y también la ropa, por supuesto. Solíamos tener muy largas conversaciones, muchas veces el tema era la moda y comparábamos notas sobre diseñadores. Teníamos muchas cosas en común, y solíamos ir de fiesta juntos, y luego nos reuníamos para ver las fotos que nos tomaban. Íbamos a bailar juntos en Nueva York y nos la pasábamos muy bien. Yo nunca voy a olvidar todos esos buenos momentos compartidos con David por lo que enterarme de su muerte fue algo muy doloroso.

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¿Es cierto que en algún momento hubo algo de competencia entre ustedes?

Es relativo. Yo creo que todos, provengan de Londres como nosotros o de cualquier otro sitio, suelen escuchar qué es lo que hacen los demás, es algo que yo incluso sigo haciendo. No sé si se puede hablar de competencia o rivalidad. Con David comentábamos las cosas que estábamos haciendo. Él bromeaba a veces sobre lo que yo hacía y a su vez yo bromeaba sobre lo que hacía él. A mí siempre me ha gustado ir a ver los conciertos de los otros grupos, y por eso solía ir a ver los de Led Zeppelin, que hicieron shows verdaderamente magníficos en el Madison Square Garden. Pero también me gustan otros géneros. Siempre iba a ver a Bob Marley porque era un gran músico. No sé si alguna vez ha habido de verdad rivalidad con otros grupos. La prensa siempre magnificó la que existía entre los Stones y los Beatles. En la música siempre hay un poco de rivalidad y eso es algo que a la gente le fascina, pero en realidad siempre ha sido mucho más fuerte la curiosidad y el interés por ver qué es lo que están haciendo los demás.

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¿En qué dirías que ha cambiado la industria de la música desde que empezaste hasta el presente?

Es muy difícil de sintetizarlo porque hay dos aspectos en la industria de la música que son muy distintos entre sí. Uno es el plano artístico y luego está la parte empresarial. Lo mismo pasa con el cine. Las películas se hacen de la misma manera que cuando yo comencé pero el marketing es completamente diferente, pero eso no tiene nada que ver con el proceso creativo. Uno podría decir que la forma en que se hace música no ha cambiado demasiado desde mis comienzos. Alguien se sienta con un piano o una guitarra, o con nada, y escribe una canción. Eso se sigue haciendo hoy igual que siempre. Yo me he sentado con compositores muy jóvenes, con una guitarra acústica, y nos ponemos a tocar. Y en ese sentido la música se crea de la misma manera en que se ha hecho en los últimos 500 o 1,000 años. Es cierto, hay mucha otra música que se crea de una manera completamente diferente, en donde es todo electrónico, y hay gente de mi edad a la que eso no le gusta nada. En cambio a mí no me molesta porque no reemplaza lo que siempre se ha hecho, simplemente es algo que amplía el panorama. Me gusta la música electrónica, me gusta el dance y todas sus variables. Es cierto, uno puede componer directamente en la computadora, o puede tocar algo en el piano y luego poner lo que has compuesto en la computadora para que todo suene de una forma completamente diferente. En ese sentido, creo que tenemos muchas más herramientas en el mundo de la música hoy que las que teníamos 50 años atrás, de la misma manera que también las tenemos en el mundo del cine, en donde ya no se filma en celuloide. La tecnología digital simplemente ayuda a encontrar formas más creativas de seguir haciendo lo que siempre hemos hecho.

Precisamente la serie Vinyl, que transcurre en Nueva York en la década de los 70, muestra un aspecto de la industria de la música que no todo el mundo conoce. ¿Por qué quisiste retratar esa época?

Siempre me pareció que la industria de la música estaba llena de personajes muy extraños, porque siempre han abundado los empresarios, los que se buscan la vida y los ladrones, sin duda un mundo muy interesante para usar en una historia. Nos llevó mucho tiempo concretar Vinyl, y en su primera concepción, cuando iba a ser una película, la historia comenzaba a mediados de la década de los 90 en una convención discográfica. La idea era cubrir muchas décadas, pero cuando lo convertimos en serie de televisión decidimos que la historia transcurriera en 1973, con muchos flashback de la década de los 60. La ambientamos en Nueva York porque es un período muy interesante de la ciudad y ese fue el año en que se estrenó Mean Streets . Además, tanto Marty como yo lo vivimos.

¿Cuánto hay de ti en el protagonista de la serie?

No mucho. Cuando comenzamos a desarrollar la historia nos preguntamos si íbamos a usar figuras de la vida real para crear a nuestros personajes. Obviamente Richie, que interpreta Bobby Cannavale, es un personaje totalmente ficticio, pero en él hay amalgamas de gente que conocimos, y también usamos a otras figuras como inspiración para los personajes secundarios, algunos son personas que conocí, de otros aprendimos a través de los libros. Cuando estábamos preparando el guion de la película hicimos mucha investigación, entrevistamos a mucha gente, tratamos de entender como se hablaba en ese mundo, cómo era el argot que usaban, porque cada industria tiene su propio dialecto. Por supuesto, como yo sé mucho sobre la industria de la música desde la década de los 60 hasta la fecha aporté mucha información. Nunca me involucré demasiado con la parte financiera de la industria, pero sé bastante sobre el tema...

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