¿Para qué sirven los cilindros de los cables?
Casi todos los cables que sirven para llevar carga eléctrica a nuestros dispositivos tienen un cilindro cerca de uno de sus extremos. A veces lo utilizamos para acomodar el cable en la entrada y pocas veces nos preguntamos qué es o para qué sirve.
Sin embargo, ese cilindro tiene un par de funciones de suma importancia para el desempeño de los aparatos eléctricos o electrónicos y, si bien podrían funcionar sin él, tendrían una vida menor o generarían mal funcionamiento.
Llamados núcleos de ferrita o filtros de interferencias electromagnéticas ( EMI ), como su nombre lo indica, filtran las corrientes parásitas y evitan que los cables pierdan energía. Es decir, hacen que la intensidad del voltaje sea más eficaz, las máquinas cargaran de manera constante y más rápido.
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Reducen las interferencias de radiofrecuencias (EMI y RFI) y su función es mantener la energía que circula por los cables. Son una barrera para cuando se presenta un pico de tensión. Su desempeño es mayor cuando se encuentran cerca de la fuente de electromagnetismo, por ello es que los encontramos cerca de los extremos de los cargadores.
Pero no es la única función de los núcleos de ferrita, pues trabajan como un inductor que bloquea los sonidos de alta frecuencia en los circuitos. Cada filtro tiene compuestos cerámicos, derivados de óxido, así como óxidos de metales de transición.
En el medio del núcleo se encuentra un cilindro de metal que absorbe y libera la radiación, permitiendo que la corriente siga circulando en el interior. Con ello evita que el cable sea una antena.
¿Qué pasa si tu cable no tiene este cilindro? La radiación haría interferencia con otros dispositivos cercanos, como cuando la señal de un teléfono celular interfiere con el radio o una bocina, esos ruidos agudos que lastiman el oído.
Los objetos funcionarían, pero su vida se vería acortada, o con estos ruidos más frecuentes.
